2. TRES VECES AL DÍA. Cepíllate los dientes tres veces al día, después de cada comida. Imprescindiblemente: antes de acostarte y tras levantarte por la mañana.
3. EL DENTÍFRICO, CON FLÚOR. Es recomendable utilizar una pasta dentífrica con flúor para prevenir la aparición de caries.
5. CAMBIA DE CEPILLO A MENUDO. Los expertos recomiendan renovar el cepillo dental cada tres meses para evitar las enfermedades periodontales.
6. NO OLVIDES EL HILO DENTAL. Utiliza a diario hilo dental; el mejor momento para usarlo es por la noche, ya que la ausencia de salivación mientras se duerme favorece la formación de placa bacteriana.
7. ENJUÁGATE. Los colutorios o enjuagues bucales constituyen una ayuda importante a la hora de mantener sana tu boca y evitar patologías e infecciones.
8. HAZ UNA DIETA SANA. Una alimentación variada y equilibrada también contribuye a reforzar el sistema inmune para que pueda defenderse ante cualquier infección en la cavidad bucal.
9. LOS CHICLES TE AYUDAN. Si comes fuera de casa y no puedes lavar tus dientes, recurre a los chicles sin azúcar o a las láminas de higiene bucal.
10. NO ABUSES DE LOS BLANQUEADORES. Aunque resultan eficaces para dar luminosidad a las piezas dentales, cuando se utilizan de forma excesiva y continuada pueden llegar a dañar el esmalte.